Sonidos

El alumno y el Maestro.

«Hay muchos sonidos que llegan en la meditación: pájaros, truenos, flautas, agua, etc. y es importante que al meditar en ellos, nos relajemos y nos dejemos ir para que pueda convertirse en «uno» con el sonido, esto resulta en una neutralidad y una sensación de dicha que puede durar de minutos a días, dependiendo de qué tan bien abandones tu conciencia mientras meditas».