
«Recuerda que no eres la mente que habla dentro de tu cabeza
tu eres la presencia que la escucha hablar.» anónimo
En mí cuerpo y en el cuerpo de cada uno de ustedes habita el Ser, el Sí mismo, el Uno, el Espíritu, lo Absoluto, cualquier nombre que le queramos dar, la religión católica lo llama Dios y nos dice: «El cuerpo humano es el templo de Dios». Dios es el mismo Ser, el mismo Espíritu para todas las creencias y disciplinas espirituales, aunque le demos diferentes nombres.
Hacer consciencia de Dios es comprender qué es la creación, qué somos nosotros, que significa la unión diferenciada de materia y espíritu, ¿por qué estamos aquí? ¿desaparecemos cuando muere nuestro cuerpo? ¿Qué pasa después de la muerte? Todo lo anterior y más son temas de la filosofía de la meditación en luz y sonido que explican y nos ayudan a comprender y aceptar nuestra existencia y nos acercan a la idea del Dios, del Ser que habita en nosotros.
No tenemos idea que es el Ser, Dios, el Innombrable. Sólo lo intuimos por sus manifestaciones y abstrayéndonos del mundo podemos percibirlo, no hay otra manera, la mayoría de los humanos si tenemos inquietudes espirituales precisamos la ayuda de un Maestro que haya realizado a Dios, para poder recorrer el camino y realizar a Dios en nosotros.
La meditación apoyada en la filosofía nos va llevando a la comprensión de la unión del Espíritu y la materia, al entendimiento de quién somos nosotros, a la comprensión de que somos el espíritu experimentando la materia. Nuestro cuerpo muere a la forma y el espíritu permanece.
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