{2} – La primera experiencia que tuve con la espiritualidad fue varios años antes de comenzar a meditar y fue a través de un sueño. Solamente, años después caí en cuenta que había sido una realización sobre el amor Divino.
En aquel entonces había tenido una caída y tenía unos dolores muy fuertes y estos dolores no se me quitaban con nada y por la época antes del sueño comencé a pensar que para qué vivir en esas condiciones Y una noche soñé que era un bebé y un ser de color azul me acunaba con infinito amor que me tenía a mí. Un amor que jamás había sentido en la vida y me desperté. Era tal el amor que me embargaba que lo único que pude hacer fue llorar y llorar. Al principio cuando contaba el sueño era inevitable llorar. El recuerdo de esa experiencia duró varios meses pero se fue diluyendo la sensación de amor que sentí. Luego con el paso de los años y estando en Meditación tuve una realización sobre el amor que yo tenía en mí. Fue una experiencia parecida ya que en ambas, lo embarga a uno un sentimiento que sólo se puede desahogar llorando. Quiero contarles que después de aquel sueño comenzaron a darse las condiciones para encontrar una ayuda eficaz y volver a moverme y caminar sin dolor.
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